Nuevos proyectos y reformas impulsan al sector energético en América Latina

Chile

Los expertos concuerdan en que México y Brasil son los principales países que atraerán capitales en los próximos años.

Miércoles 14 de Junio de 2017.- En medio de las turbulencias económicas que enfrentan los países de América Latina -y que amenazan con continuar este año según el FMI-, la industria energética podría convertirse en una de las tablas de salvación de una región necesitada de mayores fuentes de crecimiento.

Aunque la caída de los precios internacionales ha golpeado duro a este sector de la economía, el desarrollo de nuevas tecnologías de exploración y mayores incentivos para la industria han posibilitado importantes descubrimientos de yacimientos de petróleo y gas en todo el continente, desde las cálidas aguas Caribe hasta las frías pampas argentinas, configurando un panorama positivo para la región desde el punto de vista del volumen.

Apertura del mercado

Lo auguró hace dos años el ministro de Energía mexicano, Pedro Joaquín Coldwell: "2018 será el año en que se verán los efectos de la reforma energética" implementada por el Presidente Enrique Peña Nieto en 2014, que abrió el mercado del petróleo mexicano, poniendo fin a 75 años de monopolio.

"México es sin duda el país más interesante en la industria petrolera hoy. Sus reformas podrían ser una buena lección para otros países", dijo a "El Mercurio" Michael Lynch, director de Strategic Energy and Economic Research. Solo en 2016, el gobierno captó 359 millones de dólares de inversión extranjera directa en la extracción de petróleo y gas, informó la Secretaría de Economía.

Otro de los países que han optado por las reformas para potenciar el sector es Brasil. A mediados del año pasado, el gigante sudamericano acabó con el monopolio que la empresa Petrobras tenía para la explotación del presal, los gigantescos yacimientos de crudo en aguas muy profundas del Atlántico, que se calcula tienen reservas de 176.000 millones de barriles.

"El país vive un momento muy emocionante", dijo hace poco el director general de la Agencia Nacional Brasileña del Petróleo, Décio Oddone, quien aseguró que el gobierno de Michel Temer hará un esfuerzo para simplificar la regulación y las licitaciones, con el fin de atraer inversores foráneos que aumenten la productividad en el área del presal.

Por ello, para octubre y septiembre de este año están agendadas dos licitaciones que se espera permitan recaudar más de mil millones de dólares.

"La apertura en un área que estaba en la práctica cerrada a la iniciativa privada, aumentará la producción tras años de decadencia. Brasil es uno de los principales países a tener en cuenta durante los próximos años", dijo a este diario Lisa Viscidi, directora del programa de Energía de Diálogo Interamericano.

Pero la inversión no estará limitada al petróleo. El país organizará al menos una licitación de energías limpias este año y se está considerando una segunda.

Potencial no explotado

"El futuro del petróleo colombiano no es brillante", reconoció en mayo Charle Gamba, el máximo ejecutivo de la petrolera colombiana Canacol Energy, lo que da cuenta del problema en ese país.

Pero esto no significa que la energía vaya a dejar de ser un área de inversión atractiva, solo tendrá que diversificarse. Y podría ser el gas el que la sustente.

Esta fuente energética ha tomado cada vez mayor importancia y tras el reciente descubrimiento de un enorme yacimiento en las aguas profundas del Caribe -calificado como el mayor hallazgo en el país en 28 años-, sin duda se potenciará.

En Argentina, este año también empieza la "resurrección" del yacimiento de Vaca Muerta.

La eterna promesa por fin podría dar frutos gracias a la iniciativa del Presidente Mauricio Macri y a un acuerdo logrado a principios de año, que redujo los costos de producción en la segunda reserva de gas no convencional y la cuarta de petróleo no convencional del mundo.

Para 2017 se esperan USD 5.000 millones destinados al yacimiento, y las inversiones darían un salto a partir del 2019, cuando se especula que el capital anual podría alcanzar los USD 20.000 millones por los siguientes 7 años.

Y la otra gran promesa para el impulso energético en la región podría provenir de Guyana.

Tras varios años de exploraciones en la zona, en enero pasado los gigantes Exxon Mobil y Hess Corporation anunciaron el descubrimiento de un enorme yacimiento. A este hallazgo le siguieron otros dos, con lo que las estimaciones de Exxon hablan de cerca de un potencial de 2.000 millones de barriles.

Todos estos mayores volumenes de energía para exportar llevan a preguntarse por la infraestructura para hacerlo -desde puertos a ductos-, y esa solo necesidad podría abrir la puerta a otra buena noticia.

El Mercurio