Home   +562 2225 0164 info@portalminero.com

Síguenos

Skip to end of metadata
Go to start of metadata

Chile

En el último año la UC inscribió 28 solicitudes de patentes,18 fuera de Chile, triplicando el número de solicitudes en el extranjero, respecto de 2011.

Lunes 20 de Mayo de 2013.- ?A nivel mundial sólo un 10% de las tecnologías que se desarrollan logran ser transferidas, es decir, una de cada diez invenciones llegan a tener uso práctico para la sociedad.

En este contexto, la Universidad Católica (UC) está apostando por la obtención de patentes y la transferencia tecnológica de sus desarrollos.

La institución premió, en el día de la propiedad intelectual y transferencia UC -el 15 de mayo pasado-, a ocho tecnologías, las que obtuvieron en 2012 patentes en Chile y el extranjero.

Los números del patentamiento y la transferencia de la casa universitaria han crecido sostenidamente desde 2005, fecha en que la institución instauró una política de promoción y fomento de la innovación.

En el último año, la Universidad Católica se adjudicó 46 proyectos con fondos del Estado por $ 4.500 millones y se inscribieron 28 solicitudes de patentes (18 fuera de Chile) triplicando el número de solicitudes de la UC en el extranjero respecto de 2011.

A este escenario se suman las ocho patentes concedidas, tanto en Chile como en el extranjero, además de la inscripción de 28 registros de derecho de autor y dos contratos de licencia.

Punto cúlmine?

El proceso de patentamiento y transferencia es el punto cúlmine de la investigación e innovación.

Según, el subdirector de Transferencia Tecnológica y Propiedad Intelectual, Álvaro Ossa, para que una invención se patente debe cumplir con tres requisitos simultáneamente.

Primero, que la invención tenga novedad, que no se conozca en el mundo. Segundo, debe poseer nivel inventivo, es decir, que no sea obvia para una persona versada en la técnica o en el rubro. Y tercero y final, que tenga aplicabilidad industrial, esto significa que posea un uso práctico y útil para la sociedad.

“Las patentes son un medio y no un fin. El objetivo de la innovación o la investigación aplicada es la transferencia”, sostiene Ossa. Agrega que “en la medida en que nuestros investigadores puedan transferir los conocimientos y estos puedan ser útiles, contribuimos a un país más desarrollado”.

En la ceremonia, presidida por el Rector de la Universidad, Ignacio Sánchez, se reconoció también a los ganadores del I Concurso Derecho de Autor UC, que cubre proyectos de las áreas de Agronomía e Ingeniería Forestal, Ciencias Sociales, Ciencias Biológicas, Arte, Filosofía y Física, y a los ganadores del V Concurso de Patentes UC.

Ingenería: aislamiento sísmico de bajo costo
El decano de la Facultad de Ingeniería, Juan Carlos De La Llera, obtuvo patentes en Colombia y México para la utilización de un "sistema de aislamiento sísmico de bajo costo para uso masivo", tecnología que evita el daño sísmico.
El académico afirma que su invención busca "hacer que la estructura que se construya se comporte como si estuviera en un país no sísmico".
Sobre el impacto de la transferencia de su invención a la sociedad, sostiene que "masificar esta tecnología en todo tipo de estructuras tiene un impacto gigante sobre la sociedad chilena, pues le ahorra al país mucho dinero" y agrega que "Chile gasta en promedio US$ mil millones al año por daño sísmico, por lo tanto, el ideal es reducir ese daño y liberar esos recursos para otras áreas", expresa.

Fármaco: reducción de cálculos biliares
En 2004, Juan Francisco Miquel, investigador y médico de la universidad especializado en gastronterología, tuvo la idea de darle un segundo uso a un fármaco e investigar su efectividad en la reducción de la formación de cálculos biliares en humanos, enfermedad muy frecuente en la población chilena. A través de años de investigación, logró en 2012 obtener la patente en EEUU, México y finalmente, en Chile. Actualmente está esperando los resultados de patentamiento en la Unión Europea.
En tres años, el doctor obtendrá la respuesta definitiva del efecto del fármaco para reducir los cálculos biliares y asegura que el impacto de la transferencia de esta investigación a la sociedad sería la reducción de los costos de esta enfermedad en la salud pública, beneficiando a miles de chilenos.

Antibiótico derivado de la miel chilena
La académica e investigadora, Gloria Montenegro, quien desarrolló un antibiótico (producto natural) proveniente de miel chilena para su aplicación como desinfectante, tanto en vegetales como en seres humanos, obtuvo la patente de la tecnología en Canadá durante el año pasado.
La académica trabajó bajo la hipótesis de que si las plantas tenían propiedades medicinales, lo más probable es que esa característica se transmitiera a las mieles y comenzó a  desarrollar su investigación y a trabajar como matriz con los productos apícolas.
En la ceremonia, Montenegro destacó la responsabilidad social del investigador y llamó a los científicos a salir de los laboratorios y transferir sus conocimientos a la sociedad.

DC

Portal Minero