Grupo Matte golpea la mesa... pide definición para Hidroaysén

Chile

El ministro de Energía, Jorge Bunster, salió a defender -en una declaración pública- la política energética del gobierno. ?El país cuenta con una institucionalidad del sector eléctrico que le ha permitido a las más diversas empresas llevar adelante sus proyectos de inversión, cumpliendo con las normativas eléctricas y medioambientales?, dijo.

31 de Mayo de 2012.- El proyecto considera cinco centrales y una línea de transmisión para inyectar 2.750 MW al SIC.

El martes recién pasado, el directorio de la empresa Colbún -en el que participan Eliodoro y Bernardo Matte, Juan Hurtado y Vivianne Blanlot, entre otros- tomó una drástica y categórica decisión: paralizar el megaproyecto hidroeléctrico Hidroaysén. 

¿El motivo? Para la empresa no estarían las condiciones para desarrollar proyectos energéticos de la magnitud del que se proyecta en la región de Aysén, que considera un presupuesto superior a los US$10 mil millones. La decisión fue informada durante la mañana de ayer miércoles a los socios de Colbún en el proyecto Hidroaysén, la eléctrica española Endesa.

“El directorio de Colbún acordó recomendar en las instancias correspondientes de Hidroaysén la suspensión indefinida del ingreso del Estudio de Impacto Ambiental del proyecto de transmisión que inyectaría la energía generada por las centrales que componen el proyecto al Sistema Interconectado Central”, dijo el presidente de Colbún, Bernardo Larraín Matte en un hecho esencial enviado al regulador ayer por la noche.

El estudio de la línea de transmisión estaba proyectado ser ingresado hacia finales del presente año. Pero con la propuesta de Colbún, no sólo se paralizaría esta iniciativa, sino el proyecto completo, que considera cinco represas en Aysén que aportarían 2750 MW al Sistema Interconectado Central (SIC).

“Con Hidroaysén congelado puede haber tranquilidad en el gobierno y en el poder legislativo para discutir y consensuar qué política energética queremos como país”, explica un director de Colbún, quien prefiere mantener su nombre en reserva.

Y es que el objetivo de la compañía ligada al grupo Matte es, como lo dijo su presidente en el hecho esencial, tener reglas claras y una institucionalidad conocida que permanezca en el tiempo. 

“Mientras no exista una política nacional que cuente con amplio consenso y otorgue los lineamientos de la matriz energética que el país requiere, Colbún estima que no están dadas las condiciones para desarrollar proyectos energéticos de esta magnitud y complejidad. Será misión de los poderes ejecutivo y legislativo consensuar los cambios institucionales y regulatorios necesarios para viabilizar los proyectos  de generación y transmisión que demanda el desarrollo económico y social de Chile”, dijo Bernardo Larraín.

¿Cuáles son las políticas que busca Colbún? “No hay algo concreto. Puede ser una definición sobre qué porcentaje de la matriz debe ser hidro, cuánto carbón, etc. Lo importante es que haya una definición a largo plazo y que el gobierno tome medidas para conseguir el objetivo que se proponga”, explica un director de la eléctrica.

Otra de las alternativas que baraja la compañía es que la autoridad tome decisiones sobre la propiedad del proyecto, dada la magnitud que ha alcanzado. “Puede que el gobierno obligue a dividir esta iniciativa y que se licite. Puede ser, pero se deben tomar decisiones”, dice la misma fuente de Colbún.

Lo claro es que la compañía se abrió oficialmente a una modificación en la propiedad de Hidroaysén. “Cuando hablamos de nuestra disposición a adaptar la propiedad de Hidroaysen nos referimos a que se podrían incorporar socios al proyecto completo, al proyecto de transmisión o al de  generación. Estamos abiertos a cualquiera de esas alternativas”, precisó Bernardo Larraín. Y agrega: “Una cosa es decir que Colbún está abierto a adaptar la estructura de propiedad del proyecto, y otra muy distinta es decir que  nuestra participación está  a la venta. Si estuviéramos en proceso de venta, no estaríamos recomendando suspender indefinidamente su desarrollo.”

Y ya habrían avances para sumar socios. Lo claro es que Endesa no estaría dispuesta a bajar su participación en el proyecto, pues en toda iniciativa en la que participa maneja al menos la mitad accionaria. 

Por lo pronto, los máximos ejecutivos de HidroAysén se han reunido con sus pares de la gigante china State Grid. Este conglomerado podría concretar la línea de transmisión, cuyo costo supera los US$5 mil millones.

ZAPATO CHINO PARA EL GOBIERNO
En Colbún están convencidos en que la propuesta de paralizar el proyecto no es un arma de presión para el gobierno de Sebastián Piñera. “Terminamos una primera etapa que fue la aprobación de las cinco centrales.  Antes de iniciar el trámite de la línea de transmisión, es el momento oportuno para detenernos y que el proyecto sea analizado en el marco de una política energética nacional. Estamos por hacer las cosas bien”, dijo el presidente de la firma.

Un director agrega que la decisión se hizo pública un mes y medio después del fallo de la Corte Suprema que ratificó la construcción de las centrales. “No nos pueden acusar de estar ejerciendo presiones”, dijo la fuente consultada.

Sin embargo, en la industria eléctrica hay otro análisis. “Cualquier medida que anuncie el gobierno va a ser interpretada como un espaldarazo a Colbún e Hidroaysén”, dice un alto ejecutivo de una empresa generadora.

Poco antes de las 21:00 horas de ayer, el ministro de Energía, Jorge Bunster, salió a defender -en una declaración pública- la política energética del gobierno en respuesta a la postura de Colbún. 

“Se trata de la determinación de una empresa privada. No obstante, el país cuenta con una institucionalidad del sector eléctrico que le ha permitido a las más diversas empresas llevar adelante sus proyectos de inversión, cumpliendo con las normativas eléctricas y medioambientales”, sostuvo. 

Agregó que el gobierno ha impulsado una política que permita al país contar en el largo plazo con la energía suficiente para lograr las metas de ser un país desarrollado. “Al respecto, se ha elaborado una Estrategia Nacional de Energía (2012-2030), que contó con el consenso de expertos que representan las distintas visiones en materia de desarrollo energético”, precisó el secretario de Estado. 

En base a esta estrategia, dijo el ministro, el gobierno ya envió al Congreso una iniciativa legal para perfeccionar la regulación de los sistemas de transmisión “y se encuentra elaborando otros proyectos que permitan concretar esta Estrategia, como la Carretera Eléctrica Pública”. 

Mientras, Endesa y el directorio de Hidroaysén analizan la propuesta de Colbún. 

El vicepresidente ejecutivo de Hidroaysén, Daniel Fernández, dijo que “el directorio de la sociedad no ha adoptado acuerdo sobre las referidas materias, acordando analizarlas en sesiones futuras”.

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