Los desafíos pendientes a un año del accidente en la San José

Chile

El retraso en la entrega de padrones y surgimiento de faenas clandestinas son algunos de los hechos denunciados

5 de Agosto de 2011.- Aproximadamente a las 14:05 horas del jueves 5 de agosto, un derrumbe de toneladas de rocas dejó encerrados a 33 mineros al interior de la mina San José, en la Región de Atacama. Sin saber si los trabajadores estaban con vida se comenzó con las faenas de rescate, las cuales tuvieron un reimpulso casi milagroso 17 días después, cuando una sonda trajo a la superficie un mensaje escrito que le informó al mundo que todos estaban vivos.

Este episodio y el posterior rescate fueron vistos por más de mil millones de personas en el mundo, pero más allá de ser un éxito mediático, este accidente dejó grandes desafíos para la industria minera, muchos de los cuales, según empresarios de la industria, aún están pendientes.

Stella Segura, presidenta de la Asociación Minera de Ovalle, reconoce que luego de este accidente, “la gente, los colegas, han tomado un poco más de conciencia”, pero advierte que el número de empresarios que están trabajando faenas “ha disminuido bastante respecto a años anteriores”, es decir, se ha producido “un freno de la actividad”.

Segura indica que es beneficioso que se pidan planes de seguridad y de manejo en las minas, exigencias impuestas por la autoridad luego del accidente en la San José para evitar que estos casos se repitan, pero denuncia que entidades públicas como “Sernageomín siguen con falencias”, ya que “desgraciadamente no cuenta con el personal suficiente para supervisar” y entregar las certificaciones que requieren los empresarios para operar.

Pero eso no es todo. También critica a Enami al sostener que no “es efectivo” que se haya podido inscribir las minas sólo con manifestaciones previas al 30 de abril, lo que se ha traducido en el hecho de que muchos productores no han conseguido pertenecer a los padrones de la estatal, requisito primordial para vender su mineral. “No hay ninguna persona que esté empadronada y vendiendo en este rato con manifestación”, indicó.

Patricio Gatica, director de la Asociación Minera de Illapel y de la Sonami, añade que “la no aprobación del nuevo reglamento de seguridad minera que se haga cargo de la pequeña minería”, está introduciendo incertidumbre, lo cual se traduce en que “muchos mineros todavía no han podido regularizar bien sus minas”.

Gatica, de todas maneras, precisa que se está a la espera de que se inicie un programa impulsado por el gobierno para poner en orden las diferentes minas. La seremi de Minería, Jocelyn Lizana, reconoce que aún persisten problemas, pero sostiene que se han producido grandes avances y que dentro de las próximas semanas se pondrá en marcha el plan que apunta a regularizar las faenas, entregando sub­sidios y aseso­rías, justamente, “para que el minero no tenga que esconderse del Sernageomín”.

LECCIONES. Jocelyn Lizana precisó que el accidente en la mina San José “fue una oportunidad para que el país revisara su institucionalidad minera y que las personas que trabajan en el sector hicieran un autoanálisis respecto a si se están haciendo las cosas bien”.

La funcionaria pública señala que se dio un gran paso al conseguir recursos para regularizar las faenas en la región y que ahora la tarea es implementar las acciones necesarias (Diario El Día).

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