lunes 02 de octubre del 2023.- Que la mediana minería chilena sea al 2050 un referente en productividad, competitividad, seguridad y sostenibilidad. Ese es el objetivo primordial de la Hoja de Ruta Tecnológica para la Mediana Minería, iniciativa que se enmarca en el programa “Clúster para la Innovación y Tecnologización de la Pequeña y Mediana Minería (PyMM)”, que desde junio de este año está trabajando la Corporación Alta Ley, en conjunto con varias compañías mineras de la mediana minería, centros de pilotaje, Enami, las Corporaciones de Desarrollo Productivo de la Región de Atacama y de Coquimbo, Corfo, Sonami, Minnovex, el Ministerio de Minería y el Servicio Nacional de Geología y Minería.

“Es un objetivo ambicioso, pero consideramos que un impulso a este sector puede ser clave para el futuro de la minería, pues la mediana minería, junto con su amplia generación de empleos, además genera encadenamientos productivos a nivel territorial, que son imprescindibles para el desarrollo de muchas comunidades”, explica Guillermo Olivares, Líder de Minería de la Corporación Alta Ley.

Hasta la fecha se han llevado a cabo dos importantes hitos de esta iniciativa; el primero, la conformación de su directorio, y el segundo, una sesión cuyo objetivo fue la validación de la visión de la hoja de ruta, metas y levantamiento de brechas tecnológicas. La idea para los próximos meses incluye un taller para el desarrollo del plan estratégico y priorización de iniciativas estratégicas; la validación del directorio de iniciativas estratégicas priorizadas; y la difusión de principales resultados de la hoja de ruta, en diciembre de este año.

En esta entrevista Guillermo explica sobre cómo nace la iniciativa, su importancia y los desafíos a futuro.

-¿Cómo se gestó la idea de crear una Hoja de Ruta Tecnológica para la Mediana Minería? ¿Por qué es tan importante? ¿Por qué es tan importante poner foco en la Mediana Minería?

-Hay varias razones que explican el desarrollo de esta hoja de ruta tecnológica. En primer lugar, el sector de la Mediana Minería es considerado prioritario por el actual gobierno y la Política Nacional Minera del 2050, dada su importancia en la generación de empleos directos e indirectos y la exportación de productos mineros equivalentes a 2.350 millones de dólares al año. Se estima, además, que los encadenamientos productivos generados por la Mediana Minería a nivel territorial, producto de la adquisición de equipos, insumos y repuestos, así como con la contratación de servicios varios, incluyendo fletes, movimiento de tierras y mantención de equipos entre otros, son imprescindibles para el desarrollo de muchas comunidades.

En segundo lugar, el consejo estratégico ampliado de Corporación Alta Ley del año pasado propuso, con alta prioridad, el desarrollo de un Clúster para la innovación y tecnologización de la pequeña y mediana minería (PyMM).  Dado que, la Mediana Minería tiene un alto potencial de “tiraje tecnológico” y, por lo tanto, de tracción efectiva para el desarrollo local, sumado al hecho que el desarrollo de la minería del futuro se encamina hacia a un crecimiento sostenible de un mayor número de proyectos de minería de mediana escala, se consideró como actividad inicial el desarrollo de esta Hoja de Ruta Tecnológica para el sector.

-¿Cuáles son las brechas y desafíos identificados para la Mediana Minería?

– Al igual que otros segmentos de la minería chilena, la Mediana Minería enfrenta desafíos importantes en los ámbitos de productividad, competitividad y costos; regulaciones medioambientales; y en su interacción con las comunidades.

Actualmente estamos desarrollando, junto al directorio de la hoja de ruta, un levantamiento y priorización de brechas tecnológicas que nos permitan definir un conjunto de iniciativas estratégicas para el cierre de estas brechas.

-¿Cómo se espera contribuir con esta Hoja de Ruta para el desarrollo del sector?

-El objetivo fundamental de esta hoja de ruta tecnológica es definir una visión consensuada de la ruta a seguir para el desarrollo de la mediana minería en el país, identificando los proyectos tecnológicos y colaborativos necesarios, su priorización, responsables y la coordinación institucional necesaria para su ejecución y financiamiento. Este objetivo es ambicioso, ya que busca que al año 2050, la mediana minería chilena sea un referente en productividad, competitividad, seguridad y sostenibilidad, procurando maximizar el efecto traccionante del sector en los proveedores locales, la I+D+i+e colaborativa, y su contribución al bienestar de las comunidades donde se emplazan sus operaciones.