Chile
Según McKinsey, Gartner y otros analistas, la IA adaptativa, el metaverso, las superaplicaciones y la tecnología sostenible, son algunas de las tendencias tecnológicas que marcarán la próxima década.
O como el metaverso, ocupado por Gucci para publicitar su Gucci Garden Boutique, ubicada en Florencia, para quienes no pueden llegar de manera física a ella.
No obstante, avanzar a la velocidad que lo hace la tecnología no es fácil. Muchos en este afán se han equivocado. Los errores más vistosos en este campo han sido organizaciones que se lanzan con grandes apuestas, pero sin una estrategia ni propuesta de valor potente, como el fallido experimento de metaverso de la Unión Europea, llamado Global Gateway.
Algunas empresas se engolosinan con el concepto e invierten sumas a larguísimo plazo, que no se condicen con la realidad actual de la tecnología (conocido es el caso META, matriz de Facebook); otras, son muy escépticas y se quedan atrás, desaprovechando oportunidades.
Sin embrago, se pueden adoptar tecnologías de vanguardia y no morir en el intento. Para ello, resulta vital mantenerse siempre actualizado, con suficientes conocimientos técnicos y del mercado. En esa línea, es recomendable contratar servicios de capacitación y monitoreo de tecnología y trendwatching.
«Como son tecnologías nuevas, no hay definiciones unánimes de qué es IA o qué es un metaverso, lo que conlleva un riesgo de que cualquier proyecto se autodenomine IA o metaverso cuando en realidad tiene poco o nada de eso», advierte el director de Transforme, Guillermo Beuchat.
Asimismo, comenta el especialista, es fundamental tener una estrategia clara y una propuesta de valor bien definida al momento de adoptar nuevas tecnologías. Para eso es fundamental aplicar correctamente herramientas que ayuden a planificar la estrategia, detectar problemas y crear productos que los resuelvan, como Value Proposition Canvas y el Business Model Canvas (de Strategyzer).
«La correcta aplicación de dichas herramientas para este contexto exige conocer la industria, los proveedores que existen, los servicios digitales y tecnológicos que deben contratarse, los potenciales clientes a los que se puede llegar, lo que es técnicamente posible y lo que no», señala Beuchat.
Adoptar tecnologías de vanguardia de manera exitosa es posible, con una buena estrategia y acompañamiento experto.
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