jueves 05 de octubre del 2023.- Un trabajo coordinado entre profesionales de distintas áreas del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) se ha venido realizando desde el domingo 24 de septiembre pasado, cuando se registró un aumento sostenido de la energía del volcán Villarrica, y que fue fundamental para determinar un cambio de alerta técnica de amarilla a naranja.

Al respecto, la subdirectora Nacional de Geología de Sernageomin, Alejandra Ávila, explicó que “después de un análisis exhaustivo de los y las profesionales de nuestra Red Nacional de Vigilancia Volcánica (RNVV), donde todos los antecedentes recabados por las estaciones de monitoreo instaladas en el volcán Villarrica, nos mostraron una actividad anormal del macizo, que justificó el cambio de alerta técnica a naranja.

Aseveró que “lo importante es que las diversas instituciones del Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención a Desastres (Sinapred) cuentan con información técnica de lo que está sucediendo, incluyendo el mapa de peligros potenciales. Sernageomin monitorea 24/7 y en línea los volcanes más activos del país desde el Observatorio Volcanológico de Los Andes del Sur (Ovdas) y estamos permanentemente informando los cambios que se producen en ellos y especialmente en el Villarrica”.

Así, de inmediato se desplegaron equipos en la zona Lacustre, reuniéndose con autoridades regionales y locales, con comunidades de Villarrica, Coñaripe y Pucón, equipos de emergencias, y con medios de comunicación, tanto nacionales y de la zona, con el fin de informar de manera oportuna y eficaz, para evitar desinformación.

El geólogo y jefe de la Unidad de Peligros Volcánicos de Sernageomin, Franco Vera, comentó que “la Institución ha realizado un despliegue de equipos en la zona que considera el trabajo coordinado entre los profesionales de la Red Nacional de Vigilancia Volcánica, la Dirección Regional de Los Ríos, la unidad de emergencia y la oficina de comunicaciones. Estas labores consisten en el mantenimiento de la red de monitoreo, muestreo de aguas termales, sobrevuelos y coordinaciones con autoridades regionales y locales. Cabe destacar que estas son labores propias de una alerta técnica naranja”.

En tal sentido, Vera agregó que “este tipo de reuniones focalizadas buscan mantener informados a los vecinos, entendiendo cuáles son los requerimientos para que los expertos puedan informar lo que está ocurriendo gracias a las observaciones que se hacen día a día”.

Puntualizó que “desde el año pasado en particular se cuenta con información pública por medio del sitio web de la RNVV, donde la comunidad, los operadores turísticos y autoridades pueden estar viendo en línea las cámaras de monitoreo y revisar los reportes de actividad volcánica (RAV) que contienen información para ver por qué se originan estos cambios”, concluyó el profesional.