Al igual que en su anterior salida de la compañía en 2006 el experimentado ingeniero se ha encargado de lanzar varios mensajes que son leídos desde la industria minera como una despedida definitiva de la empresa.

El propio Pizarro ha confirmado a su círculo cercano que tras la inauguración de Chuquicamata Subterránea dará un paso al costado. Esto incluso se podría haber acelerado luego de las diferencias con el Gobierno. No obstante hay una serie de dificultades que resolver para dar con el nombre adecuado de su reemplazante.

La primera es presupuestaria ya que las remuneraciones que ofrece la estatal son inferiores a las que se pagan en la minería privada. Además fuentes de la industria apuntan a la desventaja de comenzar una búsqueda externa cuando al actual gobierno le quedan menos de tres años.

Otro factor de peso es el momento desafiante que atraviesa la minera que en los próximos años tendrá que enfrentar la puesta en marcha de proyectos como Chuquicamata Subterránea y Nuevo Nivel Mina claves para mantener los niveles de producción de la corporación.

Es por esto que para reemplazar a Pizarro el Gobierno echaría mano a ejecutivos que hoy se desempeñan en la minera. Si bien fuentes del directorio de la estatal dicen que aún se encuentran “conformes” con Pizarro y que no están en un proceso de búsqueda existen dos candidatos naturales internos Álvaro Aliaga y Octavio Araneda actuales vicepresidentes de operaciones norte y centro sur respectivamente.

Aliaga es cercano a Pizarro. Además ha tejido redes con personas cercanas al Gobierno pese a no ser reconocido como miembro de los partidos oficialistas. Por otro lado Araneda tendría una sensibilidad más acorde al Ejecutivo. Además ya ocupó el puesto de presidente ejecutivo de manera interina tras la salida de Thomas Keller.

Sin embargo existen otras cartas que también han sonado en los círculos de la industria durante las últimas semanas. Una de ellas es Roberto Ecclefield actual vicepresidente de Comercialización con un pasado en empresas como Anglo American y la también estatal Enap.

El ejecutivo de 43 años cuenta con una muy buena evaluación interna pero además es uno de los hombres cercanos al presidente del directorio Juan Benavides. Tiene a su haber importantes lazos con otros directores de la mesa de la estatal. En contra le juega el no contar con un perfil puramente minero.

Otro de los que integran la lista de posibles sucesores es Marcelo Álvarez actual vicepresidente de Recursos Humanos. El ejecutivo estuvo a cargo de sacar adelante la nutrida agenda de negociaciones colectivas que la estatal cerró el año pasado.