Es de suma importancia que Chile siga posicionándose como un referente en la materia, innovando y creando soluciones sostenibles que potencien la industria minera del país, perfeccionen los procesos y mitiguen los riesgos de producción. En definitiva, iniciativas que le otorguen la importancia que tiene a este mineral del futuro que hoy es una herramienta clave para temas como la electromovilidad, la creación de baterías eléctricas y más.

En este sentido, la Estrategia Nacional del Litio debe ser un gran aliado y  tomar un rol clave este 2024 para la transición energética y el aumento de las riquezas para el país. Además, la colaboración público-privada que hemos visto en los últimos meses también pasa a ser una oportunidad histórica para crear lazos estratégicos que permitan asegurar el desarrollo económico de la minería del litio.

Que el litio haya pasado de representar el 1% al 8% en las exportaciones es el punto de inicio de un camino y su alta demanda nos impulsa a actuar con urgencia en iniciativas que nos sigan posicionando como protagonistas globales de este mineral del futuro.