jueves 24 de marzo del 2022.- Con la celebración del 8 de enero, todas las compañías mineras saludaron a sus trabajadoras y recalcaron los avances que se han logrado en igualdad de género.

El primero obviamente fue gremio minero a través de la SONAMI. El balance es alentador. «En los últimos años hemos avanzado mucho en la incorporación de las mujeres, lo que ha impactado muy positivamente nuestras operaciones. Por ello, ante el desafío de seguir mejorando nuestros estándares y competitividad, necesitamos el talento de las mujeres en cada una de las capas operativas y ejecutivas de la minería”, recalcó Diego Hernández.

La mayor participación femenina no sólo ha sido una preocupación de la industria. También viene con un fuerte impulso desde el Estado. No es casualidad que la actual ministra de Minería sea mujer.

Recién este miércoles pasado, la secretaria de Estado, Marcela Hernando, tuvo una activa participación en el Women Economic Forum (WEF). En la actividad, Hernando destacó que debe haber una especial preocupación por la diversidad en las empresas. «Cada día más mujeres son jefas de hogar y si no podemos incorporar a las mujeres, no podremos mejorar la calidad de vida de las personas y las familias», Recalcó.

Entonces las ganas están, pero… por qué se avanza tan lentamente? Para algunos expertos el origen de la desigualdad surge desde la educación.
Esa es la opinión de Carolina Hernández de la Academia Holtec. Según datos presentados por el Ministerio de Educación, en el documento «Educación para la igualdad de género”, la presencia de mujeres en carreras STEM (Ciencias Básicas, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) sigue siendo muy inferior a la de los hombres.

«Las razones son conocidas por las mujeres: hacer carrera laboral lidiando con las labores del hogar y la familia y, sobre todo, los estigmas que aún cargamos por solo el hecho de ser mujeres, son lastres que dificultan el proceso”, opina Hernández.

«Lo más curioso es que todos los estudios desmienten estas creencia. La propia evidencia se ha encargado de derribar algunos prejuicios: el estudio de SIES demuestra que las mujeres se demoran menos tiempo en obtener su título, con una tasa de sobreeducación de carrera de 27,5% versus un 35,9% de los hombres. Cuando de productividad se trata, también tienden a ser más eficientes que los hombres, según datos Banco Internacional de Desarrollo (BID)”.

Este fenómeno estaría teniendo efectos en los cargos de mayores responsabilidades. Según Daniela Rapetti, gerenta General de Robert Bosch Chile, «de acuerdo con el Ranking IMAD 2021 ha habido un incremento en la participación femenina en cargos de mayor responsabilidad en las empresas en Chile, en los últimos cuatro años. El estudio muestra que el 79% de las empresas cuenta con al menos una mujer en la primera línea ejecutiva”, asegura.

También es auspicioso que el estudio Fuerza Laboral para la Gran Minería Chilena, realizada por la Universidad Católica del Norte, haya detectado que la región con mayor cantidad de población minera -como es Antofagasta- mantenga una mayor participación femenina que el promedio nacional. Un 14,7% versus un 12%.

Sin duda que todavía queda un largo camino por recorrer y que los obstáculos son severos, pero estos cambios llegarán a juicio de los expertos «más temprano que tarde”.