De este porcentaje, la mitad (15,4%) corresponde a energía fotovoltaica, seguida por la eólica con un 10,6% según el boletín de estadísticas de la Asociación Chilena de Energías Renovables y Almacenamiento (Acera).

«Para quienes trabajamos día a día en la energía solar, estas cifras no hacen más que motivarnos aún más para que cada vez, no solo la fotovoltaica, sino las ERNC en general, formen parte de un porcentaje cada vez más grande de la matriz energética. Sin embargo, todavía falta mucho por crecer en esta materia. Esto es solo el comienzo», señala Víctor Opazo Carvallo, CEO de Solek Chile.

Para que este crecimiento sostenido tuviera lugar, los Pequeños Medios de Generación Distribuida (PMGD), han jugado un papel fundamental y es esperable que, tanto en el futuro inmediato como lejano, sigan formando una parte vital en esta difícil tarea que es la descarbonización del país.

La energía fotovoltaica se encuentra en un lugar de privilegio frente a una industria que podría explotar en el futuro próximo: el hidrógeno verde, llamado de esta manera ya que para su desarrollo se utilizan energías limpias y puede darse, incluso, una cadena de suministro completamente autosuficiente si es utilizado como combustible.

Todos estos factores, tanto por sí mismos como en conjunto, se encuentran jugando un papel importante en hacer que tanto la energía solar como las ERNC en general tengan un futuro auspicioso, inmediato y a largo plazo.