Con la responsabilidad del lavado y planchado de los overoles de trabajadores de Finning entre otras tareas y actividades “La Burbuja” otorga opciones reales de desarrollo y aprendizaje a quienes cuentan con escasas posibilidades laborales.

Para David Meriño jefe de Servicio de Taller sucursal Santiago de Finning “La Burbuja” es un suministrador de servicios muy especial no solo por la calidad de su servicio sino especialmente por el valor agregado que entregan las personas que trabajan allí y con quienes a lo largo de los años hemos establecido una relación de plena confianza.

Por su parte Blanca Vivando responsable de los Talleres Laborales Protegidos de la Fundación afirma que la experiencia de trabajar para Finning también ha sido sumamente importante ya que representa una fuente de trabajo para los jóvenes y una apuesta para ayudarlos a desarrollar nuevas destrezas que les permite conectarse más formalmente con el mundo laboral.

Acerca del aporte de Finning Vivando comenta que “nuestra lavandería se sustenta con el aporte de clientes como Finning que han creído no solo en nosotros sino en nuestros chicos y sus capacidades. Finning es uno de los clientes con mayor demanda de piezas semanales dentro de la lavandería teniendo aproximadamente 30 overoles fijos para lavado y planchado semanal. Los chicos se sienten valorados con el trato recibido por el personal de Finning que se encarga de entregar y recibir las piezas; tenemos una muy buena relación con sus trabajadores y estamos muy agradecidos de que confíen en nosotros y tengan este compromiso social que resulta tan importante para la vida de estas personas que teniendo condiciones especiales merecen recibir oportunidades de desarrollo y aprendizaje”.

“Sin duda esta alianza va más allá de la conformidad por el servicio que nos brindan además nos permite sentirnos satisfechos de saber que la inclusión es beneficiosa para todos un principio en el que cree Finning firmemente”.