De esta manera, la luz UV-C se ha convertido en una necesidad para las personas, las empresas y los sectores de trabajo presencial, puesto que, la sanitización debe ser limpia y exenta de agentes patógenos, sobre todo, hoy en día, donde los casos, los contagios y los decesos por coronavirus siguen en aumento.

Esto, con la intención de resguardar la salud y la seguridad de la comunidad. Además, de ofrecer una alternativa más efectiva y rápida para la destrucción máxima del material genético del virus.

Es por ello que, surge la nuevalámpara UV-C Eurosan, con la calidad de KOLFF, con los más altos estándares de innovación, confiabilidad y rendimiento para los distintos rubros del mercado nacional; hospitales, centros comerciales, industrias, supermercados, etc.

Dado que, posee una energía UV de 254 nm que elimina un 99,9? los microorganismos en los espacios interiores. Aún más, se destaca por su fácil instalación y su gran alcance de sanitización de 30 m?2; de superficie donde el periodo de desinfección va entre los 10 hasta 15 minutos como máximo.

Asimismo, este equipo se caracteriza por su sensor de movimiento y alarma sonora que evita los efectos nocivos de la luz UV-C donde podrían llegar a ser quemaduras o, más bien, daños en los ojos y la piel si la persona no lleva el equipo de protección necesario. Y es que Eurosan destaca gracias a su alta protección.

Por último, cuenta con la certificación europea UNE 0068 que garantiza la conformidad a las normas electrotécnicas internacionales.

En efecto, KOLFF se posiciona como una de las empresas especialistas en la provisión de equipos y suministros para los diferentes sectores del mercado nacional.