A mediados del año 2022 la tasa de empleabilidad en el sector minero alcanzó su máximo histórico: aproximadamente 269.000 trabajadores, siendo la tasa más alta desde el año 2013, lo que sí bien es una buena noticia, deja pendiente desafíos por superar para que la industria siga en alza, con los claros beneficios que aquello trae aparejado para todo el país.

Tal como es sabido, la contingencia sanitaria derivada de la pandemia Covid-19 golpeó a todas las industrias, generando pérdidas de empleabilidad a nivel sectorial como mundial, no quedando exenta la industria minera de esta lamentable situación.

Cuando la pandemia estaba en su momento más álgido, Joaquín Villarino (presidente ejecutivo del Consejo Minero) explicó como la industria minera afrontó este escenario, ponderando la importancia de cuidar la salud pública y al mismo tiempo mantener -dentro de lo posible- la producción del sector.

Así, en entrevista de fecha 14 de mayo de 2020 expuso: «Apenas comenzó la pandemia tomamos medidas para cuidar a los trabajadores. Estas tenían por objeto proteger la salud de ellos y en paralelo mantener la continuidad operacional, para así no sacrificar la producción, la cual es importante no solo para los trabajadores y empresas, sino que también para el país. Desde un principio hemos tenido protocolos muy estrictos para el transporte, la habitabilidad y los lugares de esparcimiento”.

A pesar de estos esfuerzos, en aquel entonces la salud pública era preponderante, por lo cual claramente bajó el nivel operacional en la industria, y consecuentemente la tasa de empleabilidad, lo que debe relacionarse con el ambiente económico que se respiraba a nivel mundial.

En este sentido, lógicamente durante los años 2020 y 2021 se produjo una disminución de la fuerza laboral minera, la cual experimentó una baja en el nivel de ocupación laboral de un 22%, ya que la pandemia obligó a tomar diferentes medidas de seguridad para evitar contagios en las minas, dentro de las cuales estuvo la reducción de personal, situación que logró soslayarse por distintos factores.

Una de las causas que ocasionó el aumento de puestos de trabajo en la industria minera del país la encontramos en la reactivación de proyectos. A este respecto, los que habían paralizado su operación durante los años 2020 y 2021 volvieron a funcionar, ya que las condiciones sanitarias lo permitieron. Como ejemplo podemos mencionar importantes proyectos: Chuquicamata, Quebrada Blanca y Compañía Minera del Pacífico.

Asimismo, se generó un aumento en la producción de cobre a raíz de la fuerte alza de su precio, lo cual trajo consigo un beneficio para todo el sector, influyendo en la empleabilidad de la pequeña, mediana y gran industria. Un ejemplo de esto, es que en marzo de este año el cobre chileno se cotizó en US$4,867 la libra en la Bolsa de Metales de Londres, siendo el precio más alto de todos los tiempos en aquel mercado de valores.

Igualmente, es importante tener en cuenta que esta mejora no debe dejarnos tranquilos, considerando la inestabilidad económica a nivel global es poco probable que la venta del metal rojo -y empleabilidad de la industria- siga en alza, siendo necesario tomar resguardos desde ya para que no se vea afectada nuevamente la actividad económica más importante del país.