La cifra es un 15% más baja que la de mismo período del año 2020, cuando la producción fue de 868,3 mil toneladas, principalmente debido a una disminución esperada en la ley del mineral y a una menor cantidad de mineral alimentado a las plantas concentradoras.

Los ingresos ordinarios asociados a ventas sumaron US$7.145 millones, lo que representó un aumento de un 37% en comparación al mismo periodo del año 2020. Esto se debió principalmente al mayor precio del cobre.

Los costos (excluidos costos financieros netos) fueron de US$3.182 millones, un 7% más que en el mismo periodo del año 2020.

El resultado por actividades de la operación fue un ingreso de US$3.963 millones, lo que representó un aumento del 78%, debido principalmente al mayor precio.

Entre enero y septiembre del presente año Minera Escondida contabilizó impuestos a la renta e impuesto específico minero por un total de US$1.238 millones, un 91% más que en similar período del año 2020. A ello se añade el pago de US$433 millones en impuestos por distribución de dividendos.

La ganancia neta del periodo, en consecuencia, fue de US$2.663 millones, un 78% más alta a la obtenida en igual período de 2020.