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17 de Diciembre de 2010.- Con el impactante testimonio de vida de Edward Wale  ­quien producto de un grave accidente perdió sus piernas y algunos dedos de sus manos­ y los más de 150 asistentes aplaudiendo de pie, culminaron las actividades del año 2010 del Programa de Responsabilidad Social Empresarial impulsado por la Asociación de Industriales de Antofagasta, AIA.

La ceremonia, encabezada por el Presidente de la Asociación de Industriales de Antofagasta, Felipe Trevizan, y el Intendente Regional, Álvaro Fernández, estuvo llena de emociones. Primero los niños y niñas con discapacidad intelectual de la Escuela E­77 "Juan Sandoval Carrasco" recibieron el diploma por haber realizado el taller "Confección de Velas y Jabones". Cada uno de ellos recibió de manos del Presidente de la AIA y del Intendente los certificados que acreditan las nuevas herramientas adquiridas.

Luego de aquello, se procedió a la entregar un reconocimiento a los representantes de las 23 empresas que auspiciaron el programa durante el año, que permitió el financiamiento de 21 cursos que beneficiaron a  cerca de 500 personas de Taltal, Mejillones, Tocopila, Calama, San Pedro de Atacama, Sierra Gorda, Baquedano y Antofagasta.

En la ocasión, Felipe Trevizan agradeció a las empresas auspiciadoras y resaltó la importancia de la capacitación de personas que se encuentran en situación vulnerable y de aquellas que presentan alguna discapacidad.

Recordó que el trabajo de la AIA está orientado hacia un modelo de crecimiento y  desarrollo que sea capaz de satisfacer las necesidades del presente, sin comprometer las capacidades de las generaciones futuras, de allí el trabajo que el gremio realice en capital humano.

"Son muchas las personas que no han tenido la oportunidad de educarse o de capacitarse por lo que hace 11 años creamos el Programa de Responsabilidad Social Empresarial que se ocupa de entregar habilidades y competencias a aquellas personas que por sus recursos no son capaces de acceder a capacitaciones", aseguró el Presidente de la AIA.

Agregó que es fundamental el apoyo de las empresas, por lo que las instó a seguir respaldando el programa y así seguir contribuyendo al capital humano regional.
Asimismo, el Intendente Regional, Álvaro Fernández, dijo que "más que el término de un programa, es el inicio de un nuevo desafío" y se refirió al interés del Gobierno por estas iniciativas.  "Es importante que la acción empresarial y la Responsabilidad Social se expresen con aquellos que más lo necesitan", enfatizó.
Para finalizar la ceremonia, el empresario y fundador de la Fundación Wale, Edward Wale, entregó un intenso testimonio de vida, donde, en que contó como superó los difíciles obstáculos tras sufrir un grave accidente que lo tuvo al borde de la muerte.

Wale quizo estar presente  para entregar un mensaje de perseverancia y optimismo y compartir con los niños y niñas con discapacidad intelectual que fueron capacitados gracias al programa.

AIA

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