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Chile

Las mineras han dispuesto una cartera de inversiones para asegurar que la mayoría de esta producción, que supera el millón de toneladas anuales de cobre, no se pierda.

Lunes 07 de Julio de 2014.- Cuando los mineros dicen que cada día que pasa es más difícil producir se refieren a esto: los rajos se hacen más grandes, las leyes van cayendo y, sin una innovación tecnológica que ayude, extraer mineral deja de ser rentable. Tanto que a veces las minas cierran o se reconvierten, pero no pueden seguir igual.

“Es un proceso normal y dinámico en la minería”, dicen desde una gran minera del cobre con uno de estos procesos de reconversión a cuestas. Pero aunque la mayoría de estos procesos están planificados, todos coinciden en que hoy no es el mejor momento para iniciarlos, y que la continuidad de aquellas faenas que podrían hacerlo es más difícil que hace un par de años. Más aún: según cifras del Consejo Minero, en el año 2020 el 43% del mineral mundial tendrá mejor ley que Chile. 

Pero ¿cuánto de la producción nacional de cobre pasaría pronto por este proceso? Chile es un país de tradición minera, en el que las minas tienen su historia y están siendo explotadas hace varios años. Ello se nota en que, de los 5,8 millones de toneladas de cobre que produjo Chile el 2013, el 20% -1,2 millones de toneladas- proviene de yacimientos que de aquí a diez años deberían afrontar un cierre de faenas o una reconversión.

Son al menos siete yacimientos de la gran minería del cobre. Y suman poco menos de 40 mil trabajadores, entre internos y contratistas. Según el Instituto Nacional de Estadísticas, los empleados del sector a nivel nacional no superan los 240 mil.

Todo esto impactaría aún más si se suma la baja de las inversiones previstas, principalemnete por demoras o cancelaciones; que debilitarían la posición futura de Chile en el concierto mundial. La más emblemática de la lista es Codelco. La empresa está enfocada desde hace varios años en sus planes estructurales los que, dicen en la empresa, le permitiría continuar sus operaciones y no perder su capacidad de producción en el futuro. Con ellos, la minera estatal sumaría 1,2 millones de toneladas de cobre fino al año 2025.

Sin ellos, en los próximos cuatro años Codelco deberá dar inicio al proceso de cierre de tres de sus faenas: la mina rajo Chuquicamata (2021), la mina rajo y mina subterránea El Salvador (2018), y la mina rajo Óxidos Radomiro Tomic (2019). estas iniciativas representan el 45% de la producción de cobre de Codelco, cerca del 50% de sus excedentes y empleo directo para unas 21 mil personas. Sin embargo, todos estos proyectos dependen de los recursos que la minera reciba del Estado. 

Otros casos son los de Cerro Colorado, de BHP Billiton, que está en pleno proceso de solicitud de continuidad operacional, aunque varias autoridades lo ven con pocas posibilidades tras una serie de informes negativos. También la productora de cátodos Óxidos Mantoverde, de AngloAmerican, que cerraría en 2018, al igual que Carmen de Andacollo (Teck), en 2015. Candelaria, de Freeport y Sumitomo, haría lo mismo el año 2017, mientras que Michilla, de AMSA, tendría hasta el próximo año.

El Mercurio

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