Areva y Gamesa forman empresa conjunta de energía eólica

Internacional

Las dos compañías serán socias en partes iguales en el joint-venture, que "nace con una cartera de proyectos de 2,8 GW".

Lunes 07 de Julio de 2014.- La francesa Areva y la española Gamesa anunciaron la constitución de una sociedad conjunta para el desarrollo de la industria eólica en alta mar u offshore, que pretende convertirse en un "líder global" del sector. Las dos compañías estarán asociadas por partes iguales en el joint-venture, que "nace con una cartera de proyectos de 2,8 GW (gigavatios)”, afirmaron a través de un comunicado.

Entre los proyectos figura el desarrollo de una eólica gigante diseñada por Areva, de una potencia de 8 MW (megavatios), un 50% más que en los modelos actuales.

Areva, que entró en los negocios offshore en 2010 con la compra del grupo alemán Multibrid, aportará "activos por valor de 280 millones de euros, que incluyen el capital circulante del negocio actualmente estimado en 70 millones de euros", aunque esa cifra "deberá confirmarse al cierre de la operación", precisa el comunicado.

El ajuar de Areva se completa con sus fábricas existentes (en Alemania) o en proyecto (en Francia y Escocia), su capacidad fabril y logística y una cartera de proyectos de 2,8 GW, "la segunda mayor del mercado" eólico en alta mar.

Gamesa, un actor histórico de la energía eólica terrestre pero con un desarrollo algo menor en el offshore, aporta activos evaluados en 195 millones de euros, que incluyen una plataforma de 5 MW offshore y transferencias de I+D (Investigación y Desarrollo).

El Consejo de Administración contará con ocho consejeros nombrados por Gamesa y Areva (cuatro cada una). Xabier Etxeberria, Business CEO de Gamesa, será el Presidente del Consejo de Administración durante los dos primeros años. Y Arnaud Bellanger, actual vicepresidente ejecutivo de la división offshore de Areva, será el director general de la futura sociedad.

El coste promedio actual de la energía eólica offshore es de 180 a 200 euros por MWh (megavatio-hora). Si se redujera a 130 o 140 euros hacia 2020, haría factibles grandes proyectos sobre el litoral norte de Europa, expuesto a grandes vientos.