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Bolivia

9 de Septiembre de 2011.- El ducto proveerá de gas natural a las ciudades de Oruro, El Alto y La Paz. El Gasoducto Carrasco Cochabamba (GCC) debió ser inaugurado en enero de 2009, pero éste lleva un retraso de más de dos años. El presidente de YPFB­Transporte, Cristian Inchauste, dijo que será entregado dentro de 10 meses, es decir, en junio de 2012.

Entre febrero y marzo de 2008 debió iniciarse la construcción de los dos primeros tramos del ducto entre Bulo Bulo y las serranías de El Sillar, zona que es la de mayor precipitación media del país.

Ése y los trámites burocráticos emergentes de la nacionalización de los hidrocarburos fueron los factores que incidieron en la demora del inicio de obras.

Según la información de YPFB­Transporte, los trabajos en campo se iniciarán una vez que la época de lluvias haya atenuado.

Después de un retraso y el compromiso público de la CAF de financiar 100 millones de dólares para el proyecto, la entonces capitalizada Transredes se aprestó a movilizar maquinaria y personal para iniciar, los primeros días de enero en 2008, la instalación de la tubería con el fin de concluir las obras en diciembre de 2008 y empezar las operaciones en el primer bimestre de 2009. Ahora, sin embargo, la entrega de la obra está prevista para 2012.

Los tramos. Con la conclusión de los tres tramos, la inversión del proyecto será de alrededor de 172 millones de dólares. El gas que se transportará por el ducto tendrá un efecto importante al aumentar el volumen de condensado. Podrá transportar 120 millones de pies cúbicos de gas por día y 250 MMpcd cuando se instalen estaciones de compresión intermedias, volumen suficiente para abastecer el mercado interno, dijo Inchauste.

El gasoducto tiene 250 kilómetros de longitud, 16 pulgadas de diámetro y tres tramos: Carrasco­Villa Tunari, Villa Tunari­Pampatambo, y Pampatambo­Cochabamba.

La frase/Cristian Inchauste presidente de YPFB­TRANSPORTE

“Este gasoducto será entregado dentro de 10 meses y así podremos incrementar las cantidades del envío de gas natural hacia
el occidente”.

Punto de Vista/Bernardo Prado analista y editor de HidrocarburosBolivia.com

Se subestimó la dificultad del proyecto, el GCC resultó muchísimo más complejo de lo que se pensó al momento de estimar los tiempos de ejecución de la obra, las empresas responsables de cada tramo se vieron frente a retos de ingeniería que no tenían en carpeta y que por su complejidad demandaron más tiempo y más recursos para ser vencidos.

La logística no acompaño el avance de la obra y el tramo que ahora se está ejecutando es el más complicado ya que tiene que atravesar El Sillar, una zona conocida por su inestabilidad geológica y sus intensas lluvias. No me sorprendería si la inauguración del GCC se posterga aún más considerando que ahora les toca cruzar varios ríos utilizando la perforación horizontal. Por si eso fuera poco, el tendido del ducto pasará de 400 a 3800 metros sobre el nivel del mar con todas las dificultades que ese cambio de altura representa, empezando por el rendimiento de la maquinaria.

Lo rescatable de todo esto es la valiosa experiencia que con certeza han adquirido los involucrados lo que simplificará futuros emprendimientos de este tipo.

Hasta ahora, afortunadamente, los retrasos no tuvieron un impacto considerable y se pudo mantener un delicado equilibrio entre la oferta y la demanda de gas natural. Sin embargo la demanda energética, principalmente la del segmento industrial, viene creciendo mucho más de lo esperado por lo que urge concluir definitivamente y a la brevedad posible el GCC caso contrario las repercusiones sociales, políticas y económicas cobrarán la factura.

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