Minería, industria y construcción revelan desaceleración en el costo de mano de obra

Chile

El Índice de Costo de Mano de Obra (ICMO) de la minería se ubicó en 1,9% el mes de enero de 2014, cifra muy baja en comparación al 7,5% de enero de 2013 y el 9,7% de 2012.

Viernes 07 de Marzo de 2014.- Las cifras del mes del Índice de Remuneraciones (IR) y del Costo de Mano de Obra (ICMO) que entregó ayer el INE mostraron un resultado mensual positivo, dado que aumentaron en 5,8% y 6,3% en 12 meses, respectivamente. En tanto, el mes de enero presentó un buen desempeño, con un alza de 0,9 en el IR y de un 0,5% en el ICMO.

Pero al entrar en el detalle de las cifras, sectores intensivos en mano de obra muestran una tendencia que confirma la desaceleración. Minería, industria manufacturera y construcción son los tres rubros que se han visto afectados de manera más significativa por el menor ritmo de crecimiento local.

La minería, que está saliendo del “boom” del ciclo de inversiones, es por lejos el sector que más se ha resentido. La variación 12 meses del ICMO en enero fue de solo 1,9%, una reducción drástica si se compara con el 7,5% del mismo mes de 2013 y con el 9,7% de enero de 2012.

En tanto, las cifras de los otros rubros, aunque menos pronunciadas, también muestran retroceso. Por ejemplo, la construcción pasó de 8,5% en su resultado a 12 meses de enero de 2013 a un 6,1% este mes, mientras que la industria en la misma comparación varió de 6,2% a 5,1%.


Normalización del ciclo?

Al respecto, Matías Madrid, economista jefe de Banco Penta, explica la caída en la minería haciendo hincapié en el fuerte desarrollo que tuvo ese rubro durante 2012 y 2013. “La inversión minera y la tasa de crecimiento del sector en los últimos dos años fue realmente espectacular, tremendo en términos de nuevos proyectos, lo que no necesariamente significó mayor producción necesariamente, pero sí crecimiento en la mano de obra”. Además, enero de 2014 se enfrentó a una alta base de comparación.

Eso sí, reconoce que “los niveles de inversión hoy son bastante más modestos que lo que estábamos viendo, por ejemplo, el primer semestre de 2013. El sector minero ya no está creciendo más en término de proyectos o inversión”, por lo que la demanda por mano de obra no sería tan alta.

Por último, el analista cree que la tendencia de los próximos meses respecto a la necesidad de mano de obra “debería ser mucho menor que el año pasado y los últimos dos o tres años, perdiendo algo de ritmo”.

Por su parte, la economista de Libertad y Desarrollo (LyD), Cecilia Cifuentes, asegura que la baja “es más bien una tendencia a la normalización tras un ciclo minero fuertemente expansivo. Si uno mira hacia atrás, las remuneraciones que más crecieron eran las de la minería, que de hecho, arrastró a muchos otros sectores en el ‘boom’ minero. Ese ciclo terminó, por lo tanto, es razonable que se modere el comportamiento de las remuneraciones”.

Cifuentes insiste en que si bien las cifras han bajado, los números siguen siendo “muy positivos”. Sin embargo, debido a la “evidente” desaceleración de la economía local y bajo crecimiento que se espera para finales de 2014, asegura que “lo que se debería esperar es que tanto el ritmo de crecimiento de las remuneraciones como del empleo, también se moderen”.

Por otra parte, hace hincapié en que las cifras bajarían de forma moderada “a no ser que pensemos en un evento catastrófico o algún evento externo complejo”.

Otros factores que incidieron negativamente en el sector minero, según Rubén Catalán, economista de BCI, fueron ciertos “shocks” que marcaron el rubro en este primer mes del año.

“Lo que está pasando tiene que ver mucho con rebalanceos de corto plazo, hubo paralizaciones en algunas faenas, estuvo toda la negociación con los sindicatos que también fue durante enero, entonces yo creo que en particular las cifras específicas de minería las miraría con cautela”.

Catalán insiste en que “uno no puede negar que en términos generales se están notando ciertas debilidades en la economía, que se refleja en salarios más bajos, pero son debilidades incipientes”.

Ante la reducción en el ritmo de los salarios, Catalán indica que “probablemente las estrecheces que vimos en el mercado laboral en 2012 y la primera parte de 2013, y que significaron tener una tasa de desempleo en un mínimo histórico en 5,7%, ya no son tales”.

En tanto, Madrid prevé que para 2014 la tasa de desempleo aumente a cerca de 6,3%, la que, de todas formas, califica como “una muy buena tasa”.

Lo que sí le mayor preocupa es que se produzca “una desaceleración importante de la tasa de crecimiento del empleo. Veníamos creciendo sobre 2% y debería converger a un nivel más cercano a 1%” precisa.

DF