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Chile

La obra considera una inversión inicial de US$150 millones, según informó al SEIA, y tendrá una vida útil de 30 años.

Jueves 04 de Abril de 2013.- En medio de las dificultades que enfrenta la industria energética para el desarrollo de proyectos de generación, un grupo de inversionistas estadounidenses y chilenos pretenden impulsar una central a gas natural licuado (GNL) de 700 MW en la comuna de Bulnes, Región del Biobío.

Las compañías que están detrás de esta iniciativa son las estadounidenses Australis Power y Cheniere Energy, junto con las chilenas Andes Mining Energy y Gasoducto Innergy.

El primer paso para concretar el proyecto es levantar un terminal marítimo de gas natural licuado (GNL) offshore del tipo isla, el cual estará habilitado para recibir, descargar, almacenar, regasificar GNL y transportar gas natural a tierra, mediante un gasoducto submarino, lo que fue presentado ayer al Servicio de Evaluación Ambiental.

El titular del proyecto es la empresa Octopus LNG S.p.A, sociedad orientada principalmente a la operación de terminales de almacenamiento y regasificación de GNL.

El GNL será transportado por naves de transporte o carrier, las cuales abastecerán de GNL a la nave FSRU (Floating Storage Regasification Unit , donde se almacenará y se realizará el proceso de regasificación. La nave receptora estará conectada al terminal tipo isla mediante una cañería submarina de aproximadamente 2.540 metros, entregando en tierra a un ramal proyectado del gasoducto existente (Gasoducto del Pacífico), para su distribución a los centros de consumo final.

El periodo de construcción se estima en un plazo de duración de once meses y si bien el proyecto se considera de carácter indefinido, se estima la necesidad de realizar una evaluación de continuidad luego de 30 años de operación.

La inversión inicial estimada para la construcción de las obras del proyecto es de US$150 millones, de un total de más de US$1.400 millones. Además se contará con una dotación máxima de 170 trabajadores en mano de obra para el periodo de construcción y 40 para la etapa de operación.

Según señala la empresa a través del Estudio de Impacto Ambiental, el objetivo del proyecto es el abastecimiento de GNL en la zona sur del país, específicamente en la VIII Región.

Añade: "El proyecto, además de proveer de un suministro de gas natural seguro y confiable, aporta beneficios económicos asociados a la inversión de capital para nuevos proyectos, generación de empleos, creación de infraestructura, y además generación de otros ingresos asociados a la actividad.

El proyecto contempló el estudio de cuatro alternativas para la ubicación del terminal marítimo: Isla Rocuant; Penco; Lirquén y Norte de Lirquén.

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